jueves, 28 de agosto de 2014

No es un fraude. Es un robo.

Según publica el periódico de Asturias "El Comercio", la Guardia Civil ha detectado una nueva modalidad de robo.

Se trata de dos individuos que se hacen pasar por empleados de empresas eléctricas, que visitan a gente de edad avanzada para revisar sus facturas eléctricas por si hay algún error en las mismas.

Mientras uno de los ladrones entretiene a los ancianos, el otro finge recibir una llamada telefónica y sale al pasillo, donde aprovecha para robar lo que pueda.

Como asesores energéticos queremos informar de lo siguiente:
  • Ninguna empresa eléctrica envía a un "revisor de facturas" de oficio.
  • En caso de reclamación la compañía emite otra factura. Si tiene que devolver dinero, lo hace mediante banco y no envía a nadie a casa. 
  • No podemos saber "a priori" cómo son las acreditaciones de un empleado de una eléctrica. En caso de duda pedir siempre el DNI. (Y si el "empleado" se niega a exhibirlo, que se vaya por donde vino).
  • Si un trabajador de una compañía tiene que visitarnos por la razón que sea, lo normal es que se nos avise con antelación mediante carta, o con algún cartel en el edificio.

Cuanta más difusión le demos a ésta noticia, antes se podrá detener a esta cuadrilla de mezquinos sin escrúpulos.

Para acceder a la noticia completa se puede pulsar éste enlace.


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